Frankenstein: Crónica de una bestia "humana"

 Los días grises y lluviosos me hacen querer imbuirme de un sentimiento de amargura, soledad y reflexión. Quizá, por eso sea cuando mas pienso en estas obras, y en aquellas clásicas a las que aun he de dedicar mi tiempo -Bram Stoker y yo aún tenemos una cita pendiente. Por si fuera poco, mi asistencia a un ciclo de cine inspirado en la literatura de "terror" cuyo protagonismo fue indiscutiblemente de Allan Poe, terminó por hacer aflorar este sentimiento.

Este texto no pretende ser una reseña, sino una reflexión sobre el carácter de una obra fundamental en la literatura, cuyo influjo ha permeado en todos los demás artes, desvirtuándose ante la recepción y alteración por las masas.

“Even broken in spirit as he is, no one can feel more deeply than he does the beauties of nature. The starry sky, the sea, and every sight afforded by these wonderful regions, seems still to have the power of elevating his soul from earth. Such a man has a double existence: he may suffer misery, and be overwhelmed by disappointments; yet, when he has retired into himself, he will be like a celestial spirit that has a halo around him, within whose circle no grief or folly ventures.”

Frankenstein ha sido, sino la que más, una de las criaturas mas despreciadas y pervertidas por su presentación al gran público; un ser, a menudo falto de entendimiento, que se aleja de la criatura mas "humana" de la literatura inglesa. Frankenstein es un paseo sobre la reflexión, sobre la floración de sentimientos y la melancolía, sobre el mas sincero sentir y la perversión del mismo. Acompañar a una criatura frente a la mas profunda contradicción en un ambiente asfixiante en el mas puro conflicto moral y emocional.


“The world was to me a secret which I desired to devine.”

Poco se ha de decir sobre la prosa de la autora, si bien acusada de lenta y tediosa por aquellos lectores víctimas de la premura -pues la ansiedad por devorar los libros en el menor tiempo posible esta a la orden del día- verdaderamente brillante al presentar la evolución del enfrentamiento de la naturaleza "humana" de la criatura. Un proceso lento, tortuoso y casi sofocante, cuyas palabras parecen clavarse una a una como armas en un combate contra uno mismo.

En resumen, la obra de Shelley nos presenta a la criatura original; un Frankenstein tenebroso, atormentado, pero, sobre todo, un Frankenstein profundo. 🖋 
 
Puntuación: ★ 

Entradas populares